Corrupción: Cuitláhuac García Jiménez, el manotazo obligado…¿En cuál casa prefiere que lloren?
José Luis Ortega Vidal
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La captura de un teniente del ejército en el retén militar ubicado sobre la autopista Cosoleacaque-La Tinaja, el pasado martes, evidencia un acto de corrupción cuya responsabilidad es atribuible a la SEDENA.
Cristóbal “N” viajaba en una camioneta gris SUV Captiva, de la Chevrolet, cuando fue detenido para una revisión de rutina y se ubicaron 35 cajas de cartuchos para armas de distintos calibres, así como chalecos con logotipos oficiales.
El oficial del ejército que demostró estar adscrito a la zona militar de Atlixco, Puebla, no acreditó el origen legal del cargamento ni la documentación obligada para justificar su traslado.
Se le detuvo y fue puesto a disposición de una autoridad civil, la FGR, según trascendió extraoficialmente.
El retén militar se ubica a la altura del kilómetro 184, cerca de la caseta de cobro en el municipio de Sayula de Alemán, colindante con el de Acayucan.
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El caso de Araly Rodríguez, la empleada del gobierno estatal que aparece como representante de empresas a las cuales diversas dependencias oficiales de la entidad les hicieron compras por docenas de millones pesos, representa la punta de un cuerpo tan inmenso como podrido del cual emerge pus por todas partes.
Una ciudadana cuyos ingresos oficiales no rebasan los diez mil pesos mensuales, técnicamente no puede avalar la firma de contratos y contratos y contratos por cifras de seis y hasta ocho ceros, sin ser ubicada como parte de una red de corrupción.
Y sí, claro, como lo ha señalado el gobernador Cuitláhuac García Jiménez, podemos estar ante un caso de evasión fiscal…
Y también, claro, como lo ha indicado el gobernador Cuitláhuac García Jiménez, investigar y actuar contra los responsables de esta historia de corrupción demostrará que se combaten los cochupos, los arreglos ilegales, etcétera…
Hasta hoy, empero, toda la fuerza declarativa del Estado se ha canalizado en contra de Araly Rodríguez que desde ayer, por lo pronto, ya se quedó sin trabajo porque el titular de la SEV -su última ubicación laboral- anunció su despido basado en el escándalo de los contratos a todas luces irregulares…
Pero… ¿Y los responsables de las empresas, así como de las Secretarías de Salud, Seguridad Pública y el DIF?
No puedo escribir: debe haber corresponsables, porque sería incorrecto…
Debo escribir: hay corresponsables, tanto en la parte empresarial como en el gobierno.
Operaciones del tamaño de las que representa el escándalo donde -reitero, hasta hoy sólo aparece el nombre de una mujer empleada de la burocracia estatal- resultan imposibles de haberse realizado por una sola persona…
Hubo gerentes, auxiliares, contadores, administradores, compradores, proveedores, transportistas, ejecutivos bancarios, integrados a una larga cadena de mando para mover esas docenas de millones de pesos…
Y por la parte oficial hubo jefes de área, subdirectores, directores, subsecretarios y secretarios que tomaron decisiones, se informaron e informaron en su respectiva cadena de mando para movilizar el referido dinero…
Añadamos contralores internos y auditores del gobierno, del ORFIS, que debieron o deben investigar el manejo y destino del último centavo.
Todos, hablo de docenas de hombres y mujeres, supieron y/o debían saber lo que pasaba…
Más aún: hasta aquí sólo se habla de irregularidades documentales en el manejo de unos cien millones de pesos del erario.
Se requiere una investigación a fondo sobre el empleo que se dio a ese dinero; determinar si se aplicó todo en lo que oficialmente se autorizó u ordenó; porque podríamos estar, además, ante potenciales casos de desvío, de robo…
Esta posibilidad surge desde la grave irregularidad detectada a partir de los contratos asignados a una sola persona física.
Por lo que hace al aparato de gobierno, éste se mueve bajo la orden del gobernador Cuitláhuac García Jiménez.
En términos políticos detrás del jefe del ejecutivo está el presidente Andrés Manuel López Obrador quien ha puesto las manos al fuego en defensa de García Jiménez.
El ingeniero con plaza de tiempo completo en la Universidad Veracruzana afirma, reitera, insiste en ser una persona honesta, íntegra.
No tenemos elementos ni razones para dudar al respecto.
Sin embargo, se ha puesto en evidencia que en el aparato a su cargo hay casos graves de corrupción, lo que obliga por ética y por ley a una actuación inmediata y con toda la fuerza del Estado colocada en las manos del gobernador.
Esta decisión, este tipo de operación tiene implicaciones al más alto nivel en los ramos político, jurídico, legal, administrativo, judicial, de procuración y de aplicación de justicia.
De no cortar las cabezas que debe cortar y no colocar en la picota las cabezas que deben ser colocadas ante la evidente y escandalosa historia de corrupción que está lejos de concluir con el despido de Araly Rodríguez, con el tiempo la cabeza que estará en riesgo será la del propio Cuitláhuac García Jiménez.
Y es que en el ejercicio del poder ocurren actos de corrupción por acción, pero también por omisión.
Ni todas las plumas compradas, ni todas las amistades generadas, ni todas las coincidencias políticas presentadas durante los más de cuatro años de gobierno y en el contexto del proceso de sucesión del 2024, serán suficientes para defender y salvar al responsable del gobierno de Veracruz, si no actúa y decide dejar las cosas como están, apoyado sólo en su propio discurso mediático…
Cuitláhuac pertenece a una familia respetada e inteligente; decantada al ejercicio político…
El entorno de García cuenta con experiencia sobre los laberintos del poder…
Jiménez contará lo que resta de este año y parte del que sigue con el apoyo del presidente López Obrador.
Inmejorable circunstancia la suya para poner un manotazo en la mesa y que lloren en las casas donde deban llorar y no en la suya, donde ni la deben ni deben temerla de acuerdo a la información con la que se cuenta al respecto…
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Otra historia de corrupción: la de Campeche y los videos sobre los fajos de billetes entregados al equipo de Layda Sansores…
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Y no, ya no es posible montarse en el discurso aquel de: son los ladrones del pasado, son los de antes, nos atacan los enemigos del pueblo sabio…
Esa gelatina ya no cuaja; porque ya hay pruebas sobre los ladrones del presente…